En la decimoprimera audiencia del juicio por el crimen de Fernando Báez Sosa, este lunes se escucharán dos testimonios clave: declaran Juan Pedro Guarino (22) y Alejo Milanesi (23), los dos rugbiers sobreseídos. También está citado Tomás Colazo (20), un amigo de los ocho imputados que estuvo en el lugar y fue señalado como "el sospechoso número 11" por la querella, aunque no está implicado en la causa por la golpiza mortal. En una jornada que se prevé será extensa, fueron citados además tres amigos con los que chateó el acusado Blas Cinalli tras el ataque a la salida del boliche Le Brique de Villa Gesell en enero de 2020; y las madres de los rugbiers Máximo Thomsen (23) y de Luciano y Ciro Pertossi. Pasadas las 8.30, llegó Juan Pedro Guarino -uno de los sobreseídos- a los tribunales y al ingresar no se detuvo a hablar con los medios, pero ante las preguntas aseguró que se presenta para "ayudar a la Justicia".  Los ocho rugbiers que están siendo juzgados son Máximo Thomsen (23). Luciano Pertossi (21). Ciro Pertossi (22), Lucas Pertossi (23), Ayrton Viollaz (23), Enzo Comelli (22), Matías Benicelli (23) y Blas Cinalli (21). Están imputados por “homicidio doblemente agravado por alevosía y por el concurso premeditado de dos o más personas”. En caso de ser hallados culpables, la pena prevista es de prisión perpetua. También los acusan de “lesiones leves” por los golpes que recibieron los amigos de Fernando la madrugada del 18 de enero de 2020 a la salida del boliche Le Brique, en Villa Gesell.